.

miércoles, 31 de diciembre de 2008

Advertencia: NO apto para personas fácilmente ofendibles


¿Por qué crees lo que crees?


Cierto, tienes razón, es bastante injusto enfrentarte con una pregunta como esa así nomás por nomás. Esa es una de esas preguntas que no tienen una respuesta clara, sintetizada y mucho menos sencilla; por lo que en el mejor de los casos siempre terminas regresándola al que la formula: Bueno yo..., a ver, primero tu dime: ¿y tu por qué?

Bueno, otra vez tienes razón, estoy generalizando y hay personas como yo que verían en esa pregunta una gran oportunidad de hablar de lo que toda la vida les ha apasionado: investigar y conocer porqué creen lo que creen y porqué no creen otras cosas que no creen (ciencia, filosofía, teología, conceptos abstractos). ¡Qué divertidoooo! ¿No te encanta hablar de esos temas a la hora del coffee break con tus compañeros?---

Pero la realidad es que sí me apasionan estos temas...
...y sí he dedicado muchos años de mi vida a ellos...
...y sí creo que hay grandes beneficios de aprender a agarrarles gusto.

Definitivamente voy en total contra de aquél desgraciado dicho que afirma que

"De religión, política y fútbol NO se habla".

¿Y por qué no? ¡La palabra NO muchas veces nos causa tanto mal!

Si lo que mi religión dice es verdadero o falso, MERECE la pena discutirlo, y más con quien más confianza tienes, ya que entonces las diferencias en lo que cree uno y lo que cree otro tendrían que sacar a la luz nuestros errores conceptuales sobre nuestra COSMOVISIÓN, errores que pueden estar evitando que abracemos la felicidad máxima que ofrece la vida.

Si lo que la política dice es verdadero o falso, MERECE la pena discutirlo, y más con quien más confianza tienes, ya que entonces las diferencias en lo que cree uno y lo que cree otro tendrían que sacar a la luz nuestros errores conceptuales sobre cómo dirigir un país en búsqueda del BIEN COMÚN, errores que pueden estar evitando que contribuyamos a tal noble fin, que finalmente nos beneficia o perjudica también a nosotros.

Si lo que el fútbol dice es verdadero o falso, MERECE la pena discutirlo, y más con quien más confianza tienes, ya que entonces las diferencias en lo que cree uno y lo que cree el otro tendrían que sacar a la luz nuestra habilidad (o falta de ella) de poder discutir temas en los que estamos en DESACUERDO con el otro, sin que ello afecte la profundidad y sinceridad de nuestra relación con esa persona.

Y me parece que esta última, la habilidad de disentir con otro, sin que de ello dependa mi relación personal con él, es una de las habilidades de las que mayor beneficio podríamos obtener si la desarrollásemos.

Me atrevo a decir, que en nuestra capacidad de hablar de estos temas sin tapujos y sin tomar actitudes infantiles al enfrentar nuestras diferencias, recae nuestra capacidad de colaborar sinceramente con el otro, de acabar con lo que nos separa, y lograr transformar nuestra realidad en lo que tanto hemos soñado que sea.

Es por eso que he creado este blog. Separado de mis inspiraciones musicales y líricas (http://omarviazcan.com), de mis ideas más artísticas y poéticas (http://viazcanfilms.com), o de mis ganas de cambiar el mundo (http://pajamasvlog.blogspot.com). Porque creo que estos temas merecen una seriedad especial y una discusión consciente y destapada, y no tan sólo estar entremezclados y/o semi-escondidos entre canciones, pseudo-novelas y poemas: Verdad y Consecuencias es un blog que busca establecer en claro una serie de posturas serias respecto a la realidad y abrirlas a la discusión del que se ATREVA valientemente a entrar en una discusión OBJETIVA, MADURA y SERIA respecto a ellas, Se trata de dar la cara ante el mundo, afirmar lo que se cree y decir porqué, y aguantar vara cuando el otro no esté de acuerdo, no para refutarle solamente, sino para aprender de su opinión, dudar de la propia, reformular ideas, intenciones y matices y reafirmar lo que aún se cree cierto.

Los posts no serán cortos (como es mi costumbre), pero serán serios y claros, y buscarán siempre mantener un lenguaje tanto cómodo para el letrado, como accesible para el menos avanzado en este tipo de temas. Así que te desafío a que comiences un camino intelectual genuino y serio, a que te arriesgues a tener que aceptar que estás mal en algunas ideas, a confrontar tu propia vida con valentía y a tener que pensar dos veces lo que crees para poderlo defender.

Me parece que esta es la única forma de crear un genuino diálogo entre personas que les importa que su vida importe, para algo más que para verla pasar de largo. Para lograr llegar al meollo del asunto. Pero no a cualquier meollo, sino al meollo más profundo que un asunto pueda tener, visualizando perspectivas múltiples y con inteligencia y madurez, transformarnos en mejores y más útiles personas para este mundo; personas de esas que, si tuvieras el poder de dejar vivas o de desaparecer, estuvieras orgulloso de dejar vivas.

Te reto a buscar la Verdad, sin importar sus consecuencias
Te reto a buscar la Verdad, a pesar de cualquiera de sus consecuencias
Te reto a buscar la Verdad, y aprender a disfrutarla con todas sus consecuencias

Te prometo que no te arrepentirás...

No se te olvide suscribirte al blog proporcionando tu correo electrónico en el casillero que se encuentra en la esquina superior izquierda.

Próximo post: ¿Por qué creo lo que creo? (síntesis general)